viernes, 22 de octubre de 2010

Katze y su día perfecto.

Según yo, un día perfecto tendría que reunir las siguientes características y hechos:

Tendría que ser octubre y hacer un poco de calor. De desayuno comería un gran plato de "Captain Crunch" con leche helada y tomaría jugo de zanahoria.
Tendría que salir a andar en bicicleta en la tercera sección del bosque de Chapultepec escuchando Stratovarius y Demons and Wizards en mi i-pod.
Pararía en un Starbucks para tomar un Caramel Macciato y comer un Panini de tres quesos mientras leo a Tolkien y mi i-pod reproduce Haggard.
Hacia el medio día tendría que ir a una tienda de videojuegos y gastar mucho dinero en juegos y accesorios para el wii.
Regresando a casa pondría Rammstein y cocinaría spaguetti con chipotle y crepas con pollo y chile poblano. Después de comer jugaría wii un rato y después iría a casa de mamá, con mi hermana y mi abuelita, a ver un juego de la serie mundial: Sexto juego, 3 ganados de los Red Sox y que obviamente ganen (este juego tendría que ser como a las 5 de la tarde, si no no me daría tiempo).
En la noche tendría que ir a un concierto de Iron Maiden porque por mil razones ilógicas jamás he ido a uno. En el concierto tomaría Jack Daniel's (porque en un mundo perfecto venderían Whiskey en un concierto de Heavy Metal) y al salir me subiría a una motocicleta BMW 650 GS para ir a una maravillosa reunión con mis amigos en una casa con jardín y alberca en donde seguiríamos escuchando buena música, jugaríamos New Super Mario Bros Wii sentados en el pasto y cenaríamos pizza de Papa John's con cerveza helada.

Como datos extra y adicionales: me gustaría recibir la noticia de que López Obrador decidió retirarse de la política y que jamás volveremos a saber nada de él, que encontraron el modo de mantener el polo congelado para que no se extingan los osos polares, que aprobaron mi crédito para un MINI Cooper John Cooper Works, que mi ex-amigo Salvador volviera a ser mi amigo, que me llegaran por correo unos boletos de avión para unas vacaciones en Alemania y que a mi abuelita se le quitara la depresión que ella jura que no existe.

Eso, ¡ESO sería un día perfecto y no jaladas!

1 comentario: